HIPERINFLACIÓN
Esta
actividad ha sido realizada con el alumnado de 4º de ESO, en la
asignatura de Historia y dentro del Tema “El periodo de
entre-guerras (1919-1939)
Objetivos
1.-
Aprender a utilizar diferentes tipos de fuentes.
2.-
Aprender un vocabulario de carácter económico.
3.-
Aprender a relacionar acontecimientos históricos.
Temporalización
Se
han dedicado tres sesiones de una hora.
1ª
sesión: Presentación de la actividad y visionado de un vídeo.
2ª
sesión: Elaboración de la actividad.
3ª
sesión: Corrección, explicación y valoración de la actividad
programada.
Materiales
utilizados
-
Ficha de trabajo (Cuestionario, Texto literario, Lámina
de
gráficas)
-
Pizarra digital.
-
Ordenador.
Proceso
Partiendo
del libro de texto y con el objetivo de ampliar la información para
entender mejor el fenómeno a estudiar, se le facilitó al alumnado
un cuestionario que debía completar con la información obtenida de
varias fuentes:
-
Unas página de internet:
http://enriquearenz.com.ar/la-hiperinflacion-alemana-de-1923/
-
Tres vídeos:
Dos
de ellos sobre la hiperinflación
https://www.youtube.com/watch?v=WyUk-CTh70A
(seis minutos, subtitulado)
https://www.youtube.com/watch?v=1ESW5jjKr70
(un minuto veinte segundos)
El
último, más general, sobre el mundo de entreguerras
https://www.youtube.com/watch?v=fotQl8DDeNs
(siete minutos)
-
Un texto literario: Fragmento de la novela de Arthur R. G.
Solmssen “Una Princesa en Berlín
-
Una lámina con gráficas
de la República de Weimar
En
la última sesión se pasó a la corrección de dicho cuestionario
y a
la explicación de aquellos aspectos que no habían quedado lo
suficientemente claros. También hicimos una valoración general
sobre
el interés de la actividad.
Evaluación
La
actividad les ha parecido interesante al alumnado aunque ha
encontrado ciertas dificultades:
-
Para entender algunos conceptos económicos.
-
Para extraer información de fuentes audiovisuales.
-
Para utilizar las gráficas como fuente de información.
Por
ello nos planteamos para el próximo curso utilizar menos
materiales,
para no dispersar su atención, y plantear en el cuestionario
preguntas
más concretas.
Cuestionario
sobre la hiperinflación alemana de 1923
1.-
Sitúa la hiperinflación alemana de 1923 en su contexto histórico.
2.-
Define las siguientes palabras: inflación, hiperinflación, déficit,
especuladores, deflación, desorden monetario, empréstitos públicos,
impuestos, déficit fiscal.
3.-
Causas de la hiperinflación.
4.-
¿Qué medidas tomó el gobierno alemán para atajar el déficit?
5.-
Consecuencias de la hiperinflación.
6.-
¿Qué medidas se tomaron para acabar con la hiperinflación.
7.-
¿Qué consecuencias tuvo la nueva política económica?
8.-
¿Podríamos relacionar la hiperinflación alemana de 1923 con el
aumento del paro a partir del 29, el asscenso del naszismo y el
estallido de la Segunda Guerra Mundial?
Fragmento
de la novela de Arthur
R. G. Solmssen “Una Princesa en Berlín
“Pedí
la cuenta. Cuando la trajeron, estaba cuidadosamente detallada y
sumaba 650.000.000 de marcos. Muy serviciales, habían calculado al
cambio especial de 31 dólares con 63.
– ¿Puedo
ver esa cuenta? -preguntó Alfred, poniéndose las gafas de leer y,
antes de que yo pudiera evitarlo, la tomó. Christoph se puso de pie,
miró por encima del hombre de Alfred y sacó la estilográfica (…)
¡Herr
camarero¡ -gritó Alfred.
Un
momento -protesté-. Esta es mi fiesta, sé que el lugar es caro…
No
me prestaron atención. En un abrir y cerrar de ojos, el maître, el
gerente y un cajero se habían reunido en torno a nuestra mesa.
-Herr
Baron, es el procedimiento habitual aquí.
-¿Desde
cuándo? ¡Esto es ultrajante¡
¡No
es culpa nuestra, señor¡
¿De
dónde ha sacado este tipo de cambio? Usted sabe muy bien que a las
doce eran veintiséis mil millones (el dólar).
-¡Pero
ahora son las dos de la madrugada, Herr Baron¡ Tenemos que
defendernos…
-¿E
inventa por ello un nuevo cambio? ¿El cambio nocturno del Adlon?
El
cálculo da menos de veinticinco mil millones por dólar -anunció
Christoph, que había estado haciendo cuentas en el reverso de un
menú.
-Herr
Baron, tenemos que defendernos -dijo el gerente.
¿Cómo
sabremos cuál será el cambio cuando depositemos el dinero mañana
por la mañana? -preguntó el cajero. Era un joven pálido, colérico,
de piel enfermiza y gafas de cristales gruesos. Vestía un traje
raído. Parecía cansado.
-¡Usted
está cobrando en dólares, hombre¡ -dijo Christoph en tono de plaza
de armas-, ¡Mañana por la mañana valdrán más¡
Por
supuesto, ellos lo sabían perfectamente. Si yo hubiera tratado de
pagar la cuenta en marcos -suponiendo que hubiese podido llevar al
comedor más de setecientos noventa mil millones de marcos- no los
hubieran aceptado. ¿Qué hacía la gente si no tenía dólares,
libras, florines o francos? Algo que seguro no hacían era cenar en
el Hotel Adlon.
Cuando
terminaron las negociaciones, mi cuenta había sido reducida en un
dólar y veintitrés centavos, lo cual difícilmente valía la
pequeña escena”
No hay comentarios:
Publicar un comentario